Todos hemos leído mucho acerca del desastroso ejercicio que
cerraba la industria automovilística, sumida en una crisis con pocos
precedentes, si es que los hay. Sin embargo, a un sector de la población la crisis
les pega así como de refilón.
Eso se nota cuando especialmente en marcas como
Lamborghini, que termina en 2012 un año brillante en cuanto a ventas. Con 2.083
vehículos entregados y un 46% más de facturación, la firma italiana -aunque poco quede ya de su pasado transalpino- ha sido una de las protagonistas en la
presentación anual de los resultados de Audi, su casa matriz.
Según afirman, el principal responsable de este crecimiento
lo tiene el Aventador, del que se han vendido casi 1.000 unidades. A el
Gallardo tampoco se le ha dado nada mal, con 1.221 matriculaciones. Quizá no
parezcan números para tirar cohetes, pero a casi 150.000 o 200.000 euros la
unidad, creedme que son pingües los beneficios.
Así pues, Lamborghini celebra por lo alto sus 50 años. Una
buena noticia, aunque la mayoría de los que no tenemos sobres sorpresa grandes
pagas que escapan a la legislación vigente no vayamos a colaborar
adquiriendo un modelo de la marca. Mejor oírlos pasar que ver desaparecer otra
marca.
Fuente: Expansion
Muchas gracias a Ismael C. Serrano por la pista
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